Paty Chapoy, con su programa Ventaneando en México, es la Negra Candela ‘multiplicada’. La número uno en el Continente. Ella me envió desde México un productor a quien llamaban La Beba, una periodista de su staff, María Regalado, y un camarógrafo. Hicimos una negociación en dólares para darle una extensa entrevista sobre Shakira y su ciudad. Todo iba bien hasta cuando los mexicanos me dieron una información extraña:
“Hemos venido porque sabemos que Shakira tiene una hermana afrodescendiente, y sabemos el teléfono y la dirección”.
Les dije que eso era un absurdo. Pero insistían. Mientras, fuimos donde el gobernador Rodado, y en su casa nos mostró una réplica de la estatua que un alemán hizo de Shakira. Paralelamente, yo estaba promoviendo a una cantante hermosa de nombre Marienne Romero, presentándola en TV y llevándola a grabar a Cartagena. Le dijo a los mexicanos que el dinero que les había cobrado lo bajaría si me presentaban a Marianne en Ventaneando. Fue así como esta chica que estos días se casó y ahora actúa en telenovelas, sin grabar una canción, de la noche a la mañana fue impulsada en México. Luego de cuatro días de grabación, los mexicanos me dijeron muy serios: “Usted sabe información, pero no nos quiere ayudar”.
Les dije que francamente me parecía un chisme de mal gusto que ellos cazaron en México pero no tenía sentido, porque los hermanos de Shakira –incluyendo dos hermanas– eran conocidos. Me pusieron un ultimátum. Iban a desayunar, luego irían a conocer Cartagena, y sin mí buscarían la dirección de la supuesta hermana. Tenían teléfono y la casa ubicada.
Nos fuimos a las 10 de la mañana a La Tiendecita, donde empezaron a consumir toda clase de viandas. Nos acompañaba el timonel de barcos, en retiro, Españita. Todo iba bien, cuando de pronto se bajó de una moto un señor bajito, gordito, llegó primero donde mí –con un revólver–, yo pensé que era de juguete. Luego con brusquedad amenazó con matar al productor si no le daba prendas y dinero. La Beba lo hizo ante el desconcierto de los comensales. Lo dejaron apenas con la ropa.
Trataron de consolar al mexicano, pidiéndole los que estaban en La Tiendecita que no fuera a hablar mal de Colombia, y La Beba dijo: “Allá es peor, me han atracado tres veces y me mataron un sobrino”. Claro que de allí se fueron para el aeropuerto. Por la mala fe, el destino les jugó una mala pasada. Y quien salió favorecida fue Marianne, la cantante.
Por tratar de hacer un mal, se les devolvió la idea.
Bueno, se preguntarán, ¿y es que nos vamos a quedar sin saber si fue verdad lo de la hermana?
Calma, calma, mañana lo sabrán, y de paso se enterarán del milagro que hizo Shakira en Miami.
Los hermanos de Shakira siempre fueron conocidos.
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